El pueblo salvadoreño en primera fila de la lucha contra los abusos de las transnacionales mineras, se suma a la protesta que hoy los sindicatos están llevando a cabo frente al Banco Mundial en rechazo a la política comercial injusta que promueve Estados Unidos en nuestro país y Latinoamérica. Estamos seguros que cada vez vamos siendo más voces las que exigimos acuerdos políticos y comerciales que respeten la soberanía de cada país para decidir la forma en que quiere construir su destino. Nos complace y nos llena de entusiasmo la fuerza que están mostrando hoy como sociedad civil porque juntos estamos diciendo al mundo que los derechos humanos, los derechos laborales, los derechos ambientales, no son negociables y haremos todo lo que esté a nuestro alcance para que los respeten.
Hasta hoy, quienes han promovido la minería metálica en nuestro país han ocultado gran parte de la realidad que viven comunidades donde ha habido minas funcionando. Como el caso de John Machulack, dueño de la empresa Commerce Group, quien habría dicho hace poco que el río San Sebastián en el departamento de La Unión, al oriente de El Salvador, no presentaba ningun tipo deterioro en la calidad del agua; aún cuando hay estudios científicos locales demuestran que los niveles de toxicidad del río superan por mucho los estándares mínimos de control sanitario o ambiental en cualquier parte del mundo.
Quienes promueven la minería metálica ocultan que las condiciones laborales que caracterizan este tipo de trabajo están lejos de ser las idóneas y no reúnen el mínimo de disposiciones sanitarias o salariales que demandan las industrias extractivas. En El Salvador como en el resto de Latinoamérica los trabajadores tienen pocas posibiliadades de recibir indemnizaciones económicas o garantías laborales ante accidentes, lo cual no es justo y hoy estamos diciendo ¡Basta!
Quienes promueven la minería metálica en El Salvador, tal como lo hacen las empresas Pacific Rim y Commerce Group, están queriendo pasar por encima de la voluntad de las poblaciones que desde 2008 dicen NO a dicha industria. Las y los salvadoreños no creemos que la minería metálica sea ecológica o amigable con la naturaleza; laboralmente no representa una oportunidad para la mayoría de este país; y económicamente constituye una miseria y una burla que dignamente rechazamos desde lo más profundo de nuestras creencias.
Sigamos juntos en esta lucha. Estamos seguros que detrás de nuestras acciones viene amaneciendo un mejor futuro para todos.
Mesa Nacional frente a la Minería Metálica de El Salvador
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